Tras un buen inicio de temporada 2025, el sabanero revela parte de sus «secretos»
Mencionar al pueblo costero de La Sabana en el litoral venezolano, supone hablar de béisbol, es la tierra de una gran familia de peloteros en donde el talento es básicamente parte de la genética local. Nombres como Kelvin Escobar, Alcides Escobar, Ronald Acuña y ahora su hermano Luisangel son algunos de los miembros de una familia que vive, come y respira béisbol.
Maikel García, pelotero de grandes ligas con los Reales de Kansas City, también es parte de esa familia.
Primo de Ronald y Luisangel, y sobrino del otrora lanzador Kelvin Escobar. Cualquiera pensaría que en casa tiene los mentores necesarios para desarrollar su aprendizaje y mejorar su juego. Curiosamente, este offseason cambió los métodos en búsqueda de un mejor desarrollo profesional.
«Venimos de un pueblo pequeño, tenemos campos de béisbol y canchas de basketball pero jugamos pelota en cualquier parte, en la plaza, en el liceo, en la calle», dice García.
El campocorto tomó una decisión en el offseason y decidió hacer ajustes por cuenta propia, especialmente en la mecánica de bateo. «Lo hice yo solo (ajustes), me dije que voy a batear de esta manera». Afirma.
El también miembro de los Tiburones de La Guaira en la pelota venezolana recordó el movimiento de su pierna derecha a la hora de «cargar» para hacer el swing.
«Estaba levantando mucho la pierna al hacer swing y estaba fallando la recta, cambié la mecánica y me está yendo mejor en esta parte de la temporada».
«Son ajustes, y el trabajo de la temporada muerta me ayudó mucho», confirma tras mencionar también el programa de fortalecimiento físico en el gimnasio.
Después de todo, García y su familia son gente de béisbol.
En lo que apunta a ser su tercera temporada como titular con los Royals, García batea por encima de los .300, con 44 imparables, 4 jonrones y 17 empujadas. Su OPS anda por los .845 y ha sido uno de los peloteros más consistentes de su equipo.
A pesar de ser autodidacta, consejos de béisbol no le van a faltar. Su tío Kelvin fue su inspiración y motivación para jugar béisbol. «Yo era pitcher antes de ser torpedero, fue por mi tío Kelvin que elegí este deporte».
Su primo Ronald, la superestrella de los Bravos de Atlanta entrenó con García durante el invierno. Algo se debe pegar.
