La noche del domingo 22 de octubre no iba nada bien para Adolis García, el picheo de los Astros de Houston le había propinado cuatro ponches seguidos. Había lucido realmente mal. Ensordecedores abucheos le regalaron los aficionados en Minute Maid Park durante cada aparición al plato del jardinero derecho de los Rangers.
Las razones de los abucheos guardaban relación con el jonrón de García la noche del viernes en Arlington. Ese batazo fue gozado y «perreado» por el cubano con el respaldo por supuesto de poco más de cuarenta mil aficionados.
En su siguiente turno al bate, fue golpeado por un lanzamiento del derecho dominicano Brian Abreu.
Adolis enfureció y encaró al receptor boricua Martín Maldonado. Se vaciaron las bancas y como consecuencia del pleito resultaron explusados Abreu, García y el manager de Astros Dusty Baker. La tensión tras estos episodios no iba a desaparecer y de hecho, se trasladó al downtown de Houston.
48 horas después
Unas cuarenta y ocho horas después y a unas 400 millas de distancia del lugar de los acontecimientos. Adolis García recibía cuatro ponches. Cada turno al bate era adornado con el bullicio de la afición local. Es realmente fuerte el ruido. Imaginen para un bateador.
Adolis no salió a conversar con los medios, lo que fue una verdadera lástima y hasta un irrespeto a la prensa. Salvo una causal justificada, se perdió una gran oportunidad de escuchar al protagonista de esa novela.
Pero su capacidad de reponerse de malos momentos salió a flote. En la novena, García conectó un grand slam para meter el juego en el congelador y forzar el séptimo juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
«Lo he visto hacer eso antes. ponchado tres o cuatro veces en un juego y ha logrado un jonrón realmente grande. Lo hizo contra Minnesota, conectó un jonrón para dejar al equipo después de hacer algo así», dijo su compañero Mitch Garver.
Juego 7
La batalla no ha terminado, la serie está caliente. Rangers y Astros deben medirse por última vez en 2023. La serie particular en ronda regular terminó 9-4 a favor de Houston. Ahora, en Serie de Campeonato de la Liga Americaa marchan 3-3, es un asunto de vida o muerte.
Adolis ha implantado su propio record, es el primer jugador en la historia de la postemporada en recibir cuatro ponches y dar un grand slam en un mismo juego. Vaya situación.
«Si hay un jugador con el que quiero jugar en condiciones hostiles, es Adolis, y lo demostró esta noche. No pude darle al bate la pelota en los primeros cuatro turnos al bate, pero realmente marcó la diferencia en el último turno». Agregó Garver.
De una noche para el olvido a una noche inolvidable. Eso fue capaz de hacer Adolis García.