Jesús Linares @jesuslinares23
El emocionante béisbol. ¿Un juego con muchos jonrones o un duelo de picheo? ¿Qué gusta mas? Las respuestas por supuesto son variadas, pero para MLB la joya de la corona viene representada en forma de cuadrangular. Y nada mejor que un jonrón para acabar un partido.
Sucedió en el primero de la serie entre Royals y Astros esta semana en Minute Maid Park. El cubano Yordan Álvarez desapareció la pelota en el cierre del noveno inning dándole la victoria a su equipo 7×6. Una remontada interesante de Houston que estuvo abajo hasta el cierre del octavo inning. Los Royals no se rindieron, sacaron ventaja temprano y pudiero mantenerla hasta que los bates rivales estallaron.
Al día siguiente el derecho Luis García obtendría su séptimo lauro. Trabajó 6.1 entradas en las que recibió 5 carreras todas limpias incluidos dos cuadrangulares cortesía de Melendez y Witt. Yo veo que el jonrón ya no es aquel batazo imposible o muy difícil de conseguir. Todos en MLB tienen la capacidad desacar pelotas del parque, el detalle es la consistencia. Por lo que recibir uno o dos jonrones no es tan negativo como solía verse tiempo atrás.
La sabermetría mide otros factores, incluso probabilidades, estadísticas del futuro. Pero no se olviden de dos cosas. Las estadísticas tradicionales siguen siendo importantes y el juego, la mecánica y el joseo también. Eso no aparece en ninguna planilla pero allá abajo es importante.
La remontada en ese juego vino en el quinto inning. Producto de dos jonrones. Jeremy Peña y Alex Bregman. La tendencia del jonrón está presente. Un pelotero con un solo swing te empata el juego o te lo gana. Es la pelota de estos tiempos.
Para el tercer compromiso los jonrones de Royals se hicieron presente. Kansas City conectó tres cuadrangulares y ganaron 7×4. Ya es frecuente ver partidos donde el jonrón dice presente. Estamos en era de records de jonrones conectados.
El jueves 7 de julio en el cuarto y último de la serie los Astros retomaron la victoria y regresaron los tetrabatazos, esta vez Altuve y Álvarez. Royals no pudo ante el veterano Verlander quien ha tenido una gran temporada. Antes de la pausa del juego de estrellas tiene 11 victorias.
Pero los Royals demostraron que son unos chicos rudos. «No tienen nada que perder, ellos juegan fuerte» dijo una persona vinculada a MLB».
Kansas City fue agresivo en toda la serie. Corrieron las bases, tomaron riesgos y se divirtieron. Royals marchan quintos en el centro de la americana con un nada agradable 31-51, minetras que Astros juegan para 55-28 cómodamente en la cima del oeste del nuevo circuito.
Los Royals dejan un mensaje, el juego agresivo de algunos conjuntos que enfrentarán a Astros en la postemporada. Evidentemente en playoffs los equipos muestran todos sus dientes en batallas de vida o muerte, eliminación directa sin mayores posibilidades de recuperación.
Pero el jonrón sigue presente como elemento determinante del juego. A pesar del dominio de los lanzadores en general en las mayores. Será interesante ver esa batalla entre bateo y picheo junto a otros elementos como la velocidad y la defensa.
Foto: Karen Warren