Ya se apagó esa llamarada fugaz de lo que fue la Serie del Caribe Caracas 2023. Los Tigres del Licey de República Dominicana se alzaron con el título y dejaron a los locales Leones venezolanos con el subcampeonato. Repasemos un poco el pasado reciente del clásico de febrero y lo que representa hoy, para por supuesto poder proyectar lo que pudiera ofrecernos en el futuro no muy lejano, sobre todo tomando en cuenta que nuevos integrantes pudieran estar incorporándose cada vez, y porque no, abrirse a nuevas plazas y nuevos modelos de negocios.
La Serie del Caribe pasó años tormentosos. A excepción de México, las series disputadas en Margarita 2010 y 2014, así como las realizadas en República Dominicana y Puerto Rico, estaban arrojando números negativos.
El negocio no estaba resultando positivo para los inversionistas. Tras la cancelación del evento en Barquisimeto 2018, el evento deslucía y perdía interés. En aquel entonces primero Jalisco y luego Panamá aparecieron para mantener a flote el asunto, pero el saldo era negativo.
¿Se acercaba el fin de la Serie del Caribe? Algo había que hacer para levantar el evento. Los directivos de las ligas coincidían en que México era la mejor plaza. La prensa especializada también opinaba de forma similar, pero la realidad es que no tiene sentido realizar el evento todos los años en tierras mexicanas.
Aunque la idea en cuanto a números no era descabellada, porque plazas como Mexicalli, Hermosillo, Jalisco, Culiacán y Mazatlán han demostrado que hay afición para llenar plazas y estadios adecuados al espectáculo.
Sin embargo, el asunto no solo radicaba en las plazas, otro factor estaba ocurriendo a nuestras narices y nadie podía hacer nada, al menos eso parecía. La ausencia de peloteros estrellas, o dicho de otra manera la ausencia de peloteros de interés para los aficionados que pagan un boleto o un abonado.
La cercanía de la Serie del Caribe con el inicio de los entrenamientos de pretemporada, hacen que muchos atletas decidan no participar porque quizás requieran descanso para afrontar lo que pueda ser una temporada en Las Mayores, o tan simple como pelear un cupo en algún roster de MLB.
La ausencia de grandesligas desmotivó a muchos aficionados, pero siempre se dejan colar peloteros que representan ciertos intereses entre fanáticos, en su momento Tejada, Canó, Sandoval, solo por mencionar algunos. Ocurría y ocurre que el equipo campeón terminaba con mayoría de jugadores en calidad de refuerzos, lo que bajaba el nivel de competencia.
La llegada de Colombia ha dado un empuje interesante, campeones en Santo Domingo 2022, permite hablar de crecimiento en la pelota colombiana, por lo que es un atractivo para ser tomados en cuenta en futuras actividades.
Pero una movida del presidente de la Confederación del Caribe, Juan Francisco Puello Herrera hizo que el evento tomara una dirección favorable y que tras dos años de la implementación de estos cambios, se han estado viendo frutos. El asunto inició por un intento de cambiar el mando de la Confederación, encabezado en aquel momento por representantes de México, a través de Omar Canizalez antiguo presidente de la Liga Mexicana del Pacífco, pero que Puello habilidosamente pudo sortear.
La edición del año 2022 en Santo Domingo, fue un éxito. No solo en cuanto a números, sino que la asistencia al estadio Quisqueya Juan Marichal de la capital dominicana fue impresionante. Esos llenazos echaron por tierra la serie del 2016 en la que aun jugando dominicana se apreciaban asientos vacíos y poca empatía por el evento. Era preferible ver el juego en un colmadón, con unas cervezas frías, en vez de ir al estadio.
Puello y los organizadores se encargaron de darle a Santo Domingo 2022 un matiz positivo, que a su vez comprometió a Caracas 2023 a dar lo mejor. En Venezuela se estrenó el estadio de La Rinconada cuyas instalaciones son consideradas nivel MLB. Adicionalmente se jugó en el estadio de La Guaira que también lució acorde al espectáculo.
¿Cuál será el futuro de esos escenarios? No podemos dejar a un lado que Venezuela vive una crisis económica terrible y que su gobierno sinceramente no atiende al pueblo. Esa es la realidad. La construcción del estadio fue cuestionada en un momento donde los maestros protestan por el pobre salario que no llega a los 10 dólares mensuales. No deja de verse a La Rinconada como una obra para maquillar la realidad del país ante el mundo.
¿Qué pasará con esos estadios? Ojalá que no caigan en la desidia y abandono como muchas de las instalaciones deportivas del país. Desde Caracas afirman que la idea es disputar algunos juegos en la UCV y otros en La Rinconada. Tiburones por su parte podría hacer lo propio pero en La Guaira. Adicionalmente hay intención de realizar algunos juegos de pretemporada de MLB pero hoy, esto no luce tan claro.
Con respecto a la Serie del Caribe, la próxima parada será Miami 2024. Los Marlins son los organizadores del evento en un intento de conectar nuevamente con la comunidad latina del sur de la Florida. No ha sido fácil pero lo están intentando y eso es importante. Ya adelantaron que irán seis equipos, cuatro que sabemos son una fija porque son miembros de la Confederación de Béisbol del Caribe, o lo que es lo mismo, los cuatro tradicionales: México, República Dominicana, Puerto Rico y Venezuela. Es difícil que Cuba vaya en calidad de invitado, seguramente sean Panamá y Colombia, o porque no, un representativo de cubanos en el extranjero.
La Serie del Caribe ha reverdecido, en manos de los directivos está mantenerla viva. Después de Miami veremos.
Fotos: Víctor Calvo
Por: Jesús Linares @jesuslinares23